Declaración de amor

                                 Para Félix Josué 

Hijo,
Las horas a veces serán amargas 
A veces el río cristalino será una cloaca 
Y el cuerpo, una celda olvidada 
en cualquier camino 

A veces,
sentiremos como si cargáramos
              una carencia en el alma 
pero es mejor mantener el vacío 
que llenarlo con una falsa esperanza 

La vida será, uno que otro día, un plato fétido olvidado en el comedor 
Los amigos, un álbum de nostálgicas traiciones
La familia, un racimo de malvados incendios
que a veces nos aleja de la espesa oscuridad 

Saldrás a la calle y te encontrarás un cadáver 
que ahora es solo el recuerdo de alguien
que no aprendió a olvidar 
¿Lo entiendes?

Olerás el rigor de la muerte 
arrebatando de nuestras manos, la flor
El álgido color de la ausencia 
aparecerá en tu camino
El tiempo, lo único infalible, te empujará 
al abismo 

Pero aún así, hijo, 
y a pesar del estiércol que mancille tus pasos 
vale la pena caminar por el campo 
Oír el latido del corazón del colibrí 
que le palpita en las alas
Sentir la brisa que traen los libros 
cuando se abren
Ofrendar una lágrima nuestra a un sediento 

Vale la pena encontrar el amor
y hundirse en él, ahogarse
Ser un águila que hunde sus garras 
                                              en el agua 

Porque a pesar de la muerte
la vida vale la pena
Solo por el amor vale la pena. 

Félix Molina-Flórez 
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Feliz cumpleaños, hijo de mi corazón 

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